Si, has leído bien. Hoy queremos hablar de herramientas que nos permiten curar, pero no en el sentido sanador de la palabra, sino en el recopilatorio.

Hace unos días hablamos de la competencia digital del docente, entendida como aquellas habilidades, conocimientos y destrezas que nos posibilitan la realización de tareas como buscar, encontrar, almacenar, crear, comunicar y compartir contenidos con nuestro alumnado, otros docentes…

Estas habilidades, nos transforman en curadores de contenido, término que proviene del inglés content curator. Pero, ¿quién es el curador de contenidos? En palabras de Dolors Reig en su blog El caparazón, el curador es un:

“Intermediario crítico del conocimiento es alguien que busca, agrupa y comparte de forma contínua lo más relevante (separa el grano de la paja) en su ámbito de especialización. A diferencia de otras profesiones (creador, por ejemplo), su objetivo fundamental es mantener la relevancia de la información…”

Sabemos que en la red existe tal cantidad de información, que de intentar consumirla toda terminaríamos infoxicados. El curador es esa figura que se encarga de seleccionar aquella información más relevante, actual, óptima, de mayor calidad… sobre un tema y la pasa por un filtro, eligiendo, organizando y mostrando solo lo más relevante.

 

¿Cómo es el curador de contenidos?

El curador de contenidos es un especialista en un tema que emplea sus conocimientos y experiencias en valorar qué información publicada en la red es relevante, o no, para ser compartida.

Muchos comparan este perfil con el de los comisarios de arte de los museos. Son las personas que definen qué es lo más importante o interesante exhibir en un momento dado.

Los docentes, para curar contenidos, hemos de desarrollar el pensamiento crítico; analizar minuciosamente la información encontrada en la red (o fuera de ella); poseer conocimientos y experiencias que nos faciliten el análisis, destacando la relevancia de un contenido sobre todos los encontrados; ser creativos al aportar valor al contenido, enlazándolo con otros contenidos curados o realidades laborales; estar al día de lo que se publica en nuestra especialidad, actuando de forma proactiva, siguiendo tendencias, actualizándonos…; actuar de forma sistemática porque la curación exige mucha planificación previa y desarrollar el trabajo siguiendo los criterios de selección establecidos, de lo contrario se perderá el sentido de la curación.

Errores curar

 

¿Para qué curar contenidos en formación?

La curación de contenidos puede sernos muy útil en el aula, permitiéndonos a los docentes y a nuestro alumnado:

  • Recopilar materiales o recursos didácticos importantes para el desarrollo de un determinado tema
  • Coleccionar y compartir material en diferentes formatos (vídeo, audio, documentos, infografías…)
  • Fomentar en el alumnado el análisis y discusión del material a través de actividades
  • Desarrollar la capacidad evaluadora y crítica del alumnado, más si facilitamos su participación en la curación del contenido
  • Compartir con otras personas el contenido curado, dando visibilidad y credibilidad a nuestra marca
  • Conectar con otras personas, ampliando nuestro entorno personal de aprendizaje
  • Aplicar las TIC en el aula, desarrollando nuestra competencia digital

Estos propósitos se pueden transformar en actividades en el aula: crear un portafolio en el que se plasme el trabajo realizado por los alumnos y alumnas en un tema; hacer la crónica de un determinado evento en el aula (salida fuera del centro de formación, preparación de una actividad evaluadora…); crear una revista digital en la que se agrupen noticias importantes en el sector, sobre el tema trabajado en el aula o que motive al alumnado; contrastar diferentes puntos de vista sobre los que se puede estudiar la temática trabajada; aprovechar los medios sociales para dar voz al trabajo de clase permitiéndole visibilidad más allá del aula; iniciar sesiones de debate o investigación en un tema, presentando las ideas en un formato visual…

 

¿Cómo se desarrolla la curación de contenidos?

A la hora de curar contenido necesitamos pasar necesariamente por cinco fases. Hay autores que consideran que con las 3 ó 4 primeras fases es suficiente, pero es importante que como docentes valoremos la idoneidad, eficacia y eficiencia de los materiales que creemos para el aula. Las fases que recomendamos seguir son:

  1. Encontrar: Nos supone buscar, de forma exhaustiva, contenidos de interés (blogs, webs, tuits, vídeos, imágenes, infografías, documentos, presentaciones…) sobre un tema, presentes en la red de forma desordenada, repetida… Puesto que buena parte del contenido lo encontraremos a través de los medios sociales, podemos facilitarnos el trabajo utilizando las listas de Twitter, colecciones de Pinterest, noticias de LinkedIn y Facebook, creando alertas o suscribirnos a newsletter
  2. Filtrar: Esta es la parte del proceso curador más importante y que más tiempo nos va a demandar. Conlleva que investiguemos, contrastemos y analicemos todo el contenido seleccionado. Lo pasaremos por un tamiz que nos permita quedarnos con la información óptima y de mejor calidad, en función del objetivo de la curación, desechando toda aquella repetitiva, redundante y superflua..
  3. Elaborar: Una vez filtrado el contenido, llega el momento de aportarle valor. Esto es lo que diferencia la curación de contenidos del copia y pega o del simple hecho de compartir contenidos interesantes que encontramos en la red (estas dos últimas acciones no se consideran curación). La curación es una forma de subrayar la importancia de un determinado recurso, de crear nuevo contenido, de dar sentido a la información y conlleva obligatoriamente el aporte de valor. Ese extra que añadimos a cada recurso puede tener forma de extracto, síntesis o resumen, cita, historia, paralelismo con contenidos sin aparente relación… y es importante al presentarlo, que sea visual. De este modo nuestro alumnado podrá comparar y ver la interrelación que se establece entre los contenidos.
  4. Compartir: Llegados a este momento de la curación hemos de considerar cómo vamos a compartir el contenido curado. Esto supone elegir el formato (vídeo, imágenes, repositorio de documentos, noticias…) y el medio más oportuno (ya sea a través de una red social, blog…) en función de nuestro alumnado y recursos disponibles
  5. Evaluar: Conlleva la valoración del trabajo de curación realizado en función de los objetivos marcados y/o de los resultados alcanzados en aquellas actividades propuestas para las que la curación era necesaria. Hemos de extraer los puntos positivos de nuestra tarea, pero también los errores a evitar la próxima vez que realicemos una curación.

Pasos curacion

 

¿Qué herramientas podemos utilizar para curar?

Antes comentamos que hemos de diferenciar entre curar, agregar y compartir contenidos.
En muchas ocasiones, hemos compartido con nuestros alumnos y alumnas contenidos encontrados en la red, elegidos sin ningún criterio de selección específico, solo porque nos permitía ampliar, repasar, recordar algo trabajado tiempo atrás en el aula, era curioso o novedoso… En ese caso, en el que actuamos solo como transmisores, lo que estamos haciendo es compartir o, agregar si todos esos recursos los hemos reunido y presentado a través de una misma herramienta.

Esto nos ha de hacer pensar en qué herramientas nos van a permitir realmente aportar el valor que conlleva la curación de contenidos, porque no todas las encontradas en la red nos lo permiten. Entre las herramientas que facilitan la curación de contenidos podemos destacar:

Scoop.it

Apariencia Scoop.it Con una apariencia similar a una revista online, Scoop.it es una herramienta web que permite crear páginas con contenidos en distintos formatos (imágenes, webs, documentos, tuits…), agregados al encontrarlos mientras navegamos en la web o ser descubiertos en su motor de búsqueda.

Aunque únicamente está disponible en inglés, su facilidad de uso permite a muchísimos docentes utilizar la herramienta para curar contenido de sus asignaturas, temas..

Como la mayoría de las herramientas web, Scoop.it está disponible de forma gratuita y PRO. En la versión gratuita se permite crear 1 página en la que poder añadir hasta 10 curaciones diarias y enlazar con dos redes sociales.

Sin embargo, las versiones profesional o de negocios, permiten más opciones para integrar las curaciones en nuestra web o blog, distribuirlas a través de medios sociales (Facebook, Twitter, LinkedIn, Google +), hacer seguimiento y análisis de nuestras publicaciones, crear boletines de noticias para compartir las curaciones, crear más de 1 página y personalizar su apariencia…

 

Paper.li

apariencia paperliPaper.li nos permite convertirnos en los redactores de nuestro propio periódico. Se trata de una herramienta web, en la que podremos registrarnos a través de Facebook, Twitter o nuestra propia cuenta, para crear un periódico online.

Aunque originalmente se presenta en inglés, podemos seleccionar el idioma de nuestro periódico. Paper.li trabaja en un formato de boletín de noticias, con encabezados y “notas del editor” en las que podemos añadir nuestro análisis personal, criterios de selección de esa noticia sobre otras, destacar lo más importante, iniciar debate sobre lo tratado…

En su versión gratuita permite crear 1 periódico en el que recopilar contenido de hasta 10 fuentes, realizar actualizaciones de nuestras publicaciones de forma diaria, dos veces al día o semanal, avisar por correo electrónico a nuestros suscriptores cada vez que se actualiza el periódico, personalizar la apariencia de nuestro diario aplicando nuestra marca, publicar diariamente en Twitter la noticia más destacada o añadir contenido al periódico desde cualquier página por la que naveguemos.

Estas acciones se multiplican en la versión PRO que llega a permitir introducir publicidad propia, utilizar Google Analytics, trabajar en equipo, personalizar totalmente la apariencia del periódico y de la newsletter…

 

Ready4Social

Ready4Social es una herramienta web que nos permite gestionar y publicar contenido en nuestras redes sociales a la vez que curar.

La curación es el punto fuerte de Ready4Social. La herramienta nos facilita la búsqueda y selección de contenido a través de la red y nosotros solo hemos de elegir qué publicar, cuándo (puede programarse) y añadir los comentarios, aclaraciones, citas, reflexiones, análisis… que veamos oportuno en función del contenido.

Las búsquedas las concretamos al configurar la aplicación, incluyendo palabras clave relacionados con nuestras áreas de interés. Esto nos ayudará a seleccionar contenido con un gran ahorro de tiempo.

Herramientas de curacion

 

En definitiva…

Cuando creemos nuestros materiales didácticos, no olvidemos aportar a cada contenido el valor que se merece. Aporta, crea y comparte y nuestro alumnado nos lo agradecerá.

Y tu, ¿curas o compartes? Comentanos en nuestra página de Facebook